Plaza Santo Tomas

Nomas se va uno un par de años de Ensenada y ahora resulta que Santo Tomas ya se adueño de una calle entera en pleno centro? ... pues... ya se que para los ensenadenses es una güeba de tamaño mundial porque les quito al menos 200 metros (mas el estacionamiento del pando) de posibles cajones para estacionarse e ir a los comercios de por ahi, pero para uno como turista, quedo bien... aunque no sea propiamente un parque, hay pintados unos caminitos para que los chamacos sigan y jueguen. Unos cuantos espacios para sentarse que no vienen nada mal, especialmente considerando la tendencia de hacer menos cómodos los parques.

Y pues nimodo de ir a la plaza Santo Tomas sin echar unos vinos de Santo Tomas, sería pecado! En esta ocasión tenían 3 "niveles" de catas, que básicamente se alinean con lo que ellos llaman lineas de sus vinos, que obviamente van aumentando de precio: desde 100 y feria por 3 vinos por persona, hasta 500 y feria (perdón, no puse atención :P), las lineas que tienen son de los tinto misión, tinta México y linea monovarietal. Y no tenían el 4to nivel que ya es de sus ultra-premium de nivel duetto, unico y... no se cual sea el otro, pero pues, digamos que pagar 1,500 pesos por 3 muestras, este... no, asi esta bien. Para cualquiera de las primeras 3 degustaciones incluyen un vino blanco, uno rosado y un tinto. Escogimos la de la linea tinta México que viene con:

Viogner, que ahora, al parecer ya no esta en su linea monovarietal, pero lo pusieron con los de tinta México.
Rosado de grenache que no recuerdo si lo vendían con alguna de sus otras lineas.
El tinto es una mezcla de merlot y barbera que según el que nos atendió lo distribuían inicialmente en un acuerdo de exclusividad que tenían con AeroMexico donde solamente lo vendían a los asientos de primera clase y (obviamente) solamente en el avion.